El hotel presume de un diseño único del siglo XIX, con habitaciones espaciosas de diseño romántico y camas tamaño king. Para la luna de miel se recomiendan especialmente las suites premium del hotel, con vistas al famoso Prinsengracht del siglo XVII y a los canales de la ciudad. Sorprenda a su pareja con un crucero privado por los canales o un masaje en la habitación. En este hotel ningún deseo de su luna de miel perfecta quedará sin cumplir.