Hoteles en Castillos en Alemania

El Althoff Grandhotel Schloss Bensberg tiene un pasado rico y variado, cargado de significado histórico. Comenzó su andadura a finales del siglo XVII, cuando el príncipe elector Johann Wilhelm II encargó su construcción como "Maison de Rétraite". Influenciada por la grandeza de Versalles y el castillo de Winchester, esta impresionante ubicación en lo alto de la terraza de la montaña de Bensberg domina la ciudad catedralicia de Colonia, encarnando una mezcla de majestuosidad y tranquilidad. Inicialmente pensado como pabellón de caza para la segunda esposa de Johann Wilhelm, Maria-Luisa de la familia Medici, el plan se revisó para crear un impresionante castillo tras la visita del príncipe elector a Versalles. La escala del castillo asombró a los visitantes de la época, entre los que se encontraba Johann Wolfgang von Goethe.

Sin embargo, el castillo fue testigo de un desafortunado giro del destino. Tras la muerte del príncipe elector en 1716, sin haber adornado nunca su "Versalles renano", su viuda regresó a Italia, llevándose consigo a todos los artistas, yeseros y pintores que contribuían a la terminación del castillo. Como resultado, el edificio quedó inacabado, sirviendo posteriormente como hospital militar, escuela de cadetes, internado y centro de refugiados a lo largo de diferentes periodos. En 1997, la compañía de seguros de vida Aachener & Münchener adquirió el ruinoso edificio. Con una inversión de 75 millones de euros, transformaron el histórico edificio en un hotel de lujo de renombre internacional. En 2000, el Grandhotel Schloss Bensberg abrió sus puertas, inaugurando así un nuevo capítulo de su ilustre historia.

SCHLOSS Fleesensee fue construido inicialmente en 1842 por Ludwig Graf von Blücher, pero pronto quedó destruido en un incendio que se declaró en 1912. Durante la Segunda Guerra Mundial, el ejército soviético utilizó el castillo como hospital militar, pero también como vivienda familiar, guardería, tienda e incluso punto de recogida de huevos. Tras la caída del comunismo, el castillo se convirtió en un lujoso hotel y desde entonces recibe a sus huéspedes y les ofrece una experiencia mágica.

Ernest von Ihne, arquitecto real de Federico III y el Kaiser Guillermo II, diseñó numerosas residencias reales para nobilitas alemanes y austriacos. Este hotel es uno de sus mayores logros. Fue construido hacia 1890 en honor del emperador Federico III y la emperatriz viuda Victoria de Alemania. Justo al lado de la Gruta de la Emperatriz es un lugar idílico para eventos bajo el sol. El salón de banquetes es el favorito de los invitados para bodas y grandes eventos.

El Schlosshotel Ralswiek fue construido inicialmente entre 1894 y 1896 por el conde Douglas, y los jardines y algunas otras partes se añadieron o ampliaron un poco más tarde. Tras la Segunda Guerra Mundial, la Cruz Roja Alemana lo utilizó como residencia de ancianos y asilo para discapacitados. A finales de la década de 1990, sus actuales propietarios adquirieron el castillo e iniciaron las reformas para convertirlo en el majestuoso castillo-hotel que es hoy. Aparte de su inmensa historia, el hotel castillo también contiene algunos muebles auténticos del siglo XIX, que contribuyen al ambiente de época que desprende.

El castillo de Hugenpoet se menciona por primera vez en el siglo VIII, cuando era la casa solariega de Carlomagno. En el siglo XV, el castillo fue completamente destruido durante unas disputas y se reconstruyó cerca de sus ruinas. Adoptó la forma actual en el siglo XVII y se utilizó como residencia privada primero y como sede temporal de un museo después. En la década de 1950, el castillo se convirtió en hotel.

El Greenline Schlosshotel Blankenburg - Harz es un edificio de gran importancia histórica, ya que no sólo se encuentra en una de las zonas de mayor riqueza histórica y cultural de Blankenburg, sino que también está situado en el parque que rodea el castillo de Blankenburg. El hotel ofrece servicios y comodidades de alta calidad, así como una experiencia de lujo a cada huésped, mientras que su proximidad al castillo lo hace ideal para quienes deseen profundizar en la historia de la zona.

La primera mención de una fortaleza situada exactamente donde hoy se alza el Schlosshotel Steinburg se remonta al siglo XIII. Al parecer, su fortificación no era tan invencible como se creía, por lo que el castillo fue completamente destruido. A finales del siglo XIX, las ruinas del castillo se reconstruyeron para albergar un restaurante que pronto cerró por diversos motivos. En la década de 1930, el castillo fue renovado de nuevo, con algunas modificaciones en sus torreones, y se convirtió en un hotel en la década de 1950.

Originalmente un castillo eslavo de alrededor del siglo XVI, el Schlosshotel Fürstlich Drehna encierra una larga historia tras sus puertas. El castillo fue reconstruido a mediados del siglo XVI tras la toma de la ciudad de Drehna, añadiéndole tres torres defensivas y amurallando el foso. El castillo cambió de manos y fue renovado con bastante frecuencia, mientras que adquirió su nombre actual en 1807. Hoy es un encantador hotel castillo que invita a sus huéspedes a vivir en su encantador territorio durante sus vacaciones.

La historia del castillo de Tangermünde se remonta al siglo XI, cuando se menciona por primera vez. Tras haber sido residencia de varios emperadores, reyes, condes y príncipes, y estar situado detrás de una fuerte fortificación en una ciudad histórica, el castillo consigue conservar parte de su encanto original y ambiente de época incluso hoy en día. También hay un museo donde los visitantes interesados pueden aprender más sobre la apasionante historia del castillo y de la zona, que abarca siglos.