Hoteles en Castillos en Herkenbosch

El castillo fue construido inicialmente en el siglo XIV por el señor de Wassenberg como pabellón de caza. Desde entonces ha cambiado de manos y ha albergado a varias familias nobles. El castillo estuvo en ruinas durante muchos años, hasta que fue reconvertido en el hotel que es hoy.

El castillo data del siglo XIV y fue construido por Otte von Holtmühle, de quien también tomó el nombre. A lo largo de los siglos, el castillo cambió muchas manos y estuvo abandonado durante muchos años. Hoy es un encantador hotel castillo histórico, cuya característica más distintiva es el foso lleno de agua que existe justo enfrente.

Este castillo fue construido a mediados del siglo XVII por dos hermanos sacerdotes, que también construyeron una capilla justo al lado. El edificio, tal y como se conserva hoy en día, utiliza también algunas partes de la capilla.

El castillo fue construido inicialmente por un señor y estaba rodeado por un foso y una firme fortificación a su alrededor. En el siglo XVI, el castillo fue destruido por un incendio, pero pronto se reconstruyó tal y como estaba antes. Muchos condes y barones vivieron en el castillo a lo largo del tiempo, y uno de ellos lo renovó en el siglo XIX según el estilo gótico de la época, estilo que conserva hasta hoy. Durante la mayor parte del siglo XX, el castillo se utilizó para alojar a mineros, y tras una renovación que finalizó en 1999 se convirtió en el hotel que es hoy.

La construcción inicial del castillo se remonta al siglo X, pero el castillo tomó forma en el siglo XI. A lo largo de los siglos, el castillo albergó a numerosas familias nobles. Debido a su situación estratégica, el castillo fue blanco constante de ataques enemigos durante las guerras, y fueron muchas las veces en que quedó casi completamente destruido. En el siglo XVIII, tras haber sido destruido y reconstruido, su entonces propietario lo reformó en una mansión neogótica, estilo que conserva hasta hoy. El castillo se abrió por primera vez como hotel en 1968, pero la turbulenta historia de su propietario no acabó ahí, ya que volvió a cambiar de manos en numerosas ocasiones hasta que sus actuales dueños lo adquirieron en 2018.